14/02/2019

El titular de la Confederación Argentina de la Mediana (Came), Gerardo Díaz Beltrán, se reunió ayer junto a otros directivos empresarios con el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), Leandro Cuccioli. La reunión de urgencia tuvo como tema central lograr cambios en los mayores intereses que el organismo recaudador nacional adelantó que empezará a cobrar desde marzo a todas las empresas.


En la reunión, tras las explicaciones de las entidades pymes, la Afip ofreció no cobrar mayores intereses en los planes de pago a las pequeñas y medianas empresas. Así, respetará el nivel actual del 3% mensual para el pago de compromisos fiscales, pero sí cobrará un mayor interés por cargos punitorios. Las grandes empresas, en tanto, sí deberán hacer frente al mayor costo de financiamiento con la Afip.


Por otra parte, los dirigentes de Came le plantearon la preocupación por los embargos que se están ejecutando a empresas incluso en zonas declaradas de emergencia hídrica.


“Lo que hemos conseguido es que para las mypymes y pymes, la tasa de financiación sea de hasta el 3% como se venía aplicando hasta ahora. Las grandes empresas sí van a tener una modificación de tasas y también los intereses punitorios tendrán incremento. Lo que hemos logrado es que en todo lo que se financie como plan, el techo de la tasa sea del 3 por ciento. Y si hay una baja de tasas, esa tasa también va a bajar. Esto tendería a bajar los costos fiscales para las pymes”, explicó Gerardo Díaz Beltrán en diálogo con El Territorio.


El titular de Came relató que contaron al administrador federal que “las pymes hacen malabares para pagar impuestos. Le explicamos que en muchos casos las empresas, un mes pagan a proveedores, otro mes nivelan salarios y así con otras deudas, tratando de que no se embarguen las cuentas para seguir operando”. Se remarcó en la reunión que por estos meses las pymes están haciendo lo imposible por sobrevivir.       


El campo preocupado


Ayer el presidente de la entidad cooperativista Coninagro, Carlos Iannizzotto, remarcó que “se sigue tensando el ahogo tributario en la actividad económica”. El directivo se refirió así a las mayores exigencias de intereses de la Afip para el mes próximo.


Se recordó que por medio de una resolución se incrementaron en casi un 50 por ciento las alícuotas de los intereses resarcitorios (del 3 al 4,5 por ciento mensual) y punitorios (del 4 al 5,6 por ciento mensual) que liquida y percibe la Afip sobre las deudas de tributos, derechos aduaneros y recursos de la seguridad social.


Por eso, la entidad cooperativista se comunicó con el Ministerio de Producción y con la Secretaría de Agroindustria para reclamar por dichas medidas. Se estimó que al igual que el sector pyme, las medidas no se aplicarán para la mayoría del sector rural.


“Si bien hubo una rápida respuesta  desde el Gobierno, ya que tanto desde el Ministerio de Producción, que conduce Dante Sica, como del secretario de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, se han comunicado rápidamente con Afip con el fin de aclarar una situación que podría perjudicar aún más a los productores, nos preocupa esta situación”, dijo Iannizzotto.


Para los productores afectados por malas condiciones climáticas, los especialistas sugieren “monitorear los sectores agrícolas con la mayor precisión posible para denunciar y obtener las declaraciones de emergencia agropecuaria en el marco de la ley nacional 26.509, que posibilita la prórroga de vencimientos en el pago de tributos sin el devengamiento de intereses”.


Mercantiles: “Hay más despidos, suspensiones y retiros voluntarios”


Héctor Benigno Gómez, secretario del Centro de Empleados de Comercio de Posadas, comentó la difícil situación que atraviesa el sector mercantil.


Y remarcó que hasta el momento no se avizoran señales de recuperación, en consonancia con la estimación que lanzó ayer la Organización Internacional del Trabajo.


“Estamos viendo una caída real y muy importante de la actividad comercial en Posadas. Hay más pedidos de suspensiones, despidos y también retiros voluntarios”.


Y explicó que “las suspensiones se dan con los pedidos de reducción de cargas horarias en comercios”.


Gómez comentó que ya en diciembre “esperábamos una actividad en baja porque siempre sufrimos como coletazos lo que ocurre primero en otras provincias. Aquí el efecto de la suba del combustible se sintió más por la distancia y se agudizó con la menor actividad”.


Remarcó que desde el sindicato “estamos tratando de que los trabajadores no pierdan su empleo, hablando, dialogando, viendo opciones para que no se llegue a los despidos”.


Desde el gremio también se apuntó que hay diálogos constantes con otros gremios para articular reclamos y que se escuchen sus recomendaciones para proteger el trabajo local.


Menos empresas y trabajo


Según estimaciones de entidades empresarias, en el país se cierran unas 25 pymes por día y durante enero unos 80 comercios solamente en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.


“Es el número que estamos manejando con la UIA (Unión Industrial Argentina), pero no llega a representar la gravedad de la situación. Porque si bien es una cifra enorme de pymes que están cerrando, muchas otras se trasladaron a la economía informal, generando un esquema de precarización productiva que va a tener consecuencias muy graves a futuro”, aseguró Ariel Aguilar, dirigente de la Confederación General Empresaria de la República Argentina (Cgera).


 


 


Fuente: El Territorio


 


 

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