El Pincha ganaba en Rosario y era puntero, pero sobre la hora la Lepra logró el 1-1.
Newell’s y Estudiantes igualaron 1-1 este martes en Rosario, en el cierre de la fecha 10 del Torneo Clausura 2025, en un duelo que enfrentó a dos equipos con presentes opuestos.
El Pincha, que llegaba golpeado en el plano internacional, se puso en ventaja a los 30 minutos del segundo tiempo gracias a un tanto de Eric Meza. El gol silenció al Coloso Marcelo Bielsa y encendió la ilusión de los platenses de trepar a la cima de la zona A.
Cuando parecía que la visita se llevaba los tres puntos, apareció Luciano Lollo en tiempo cumplido para estampar la igualdad y desatar el desahogo leproso. El 1-1 final calmó en parte las aguas en Rosario, donde el clima estaba cargado por la crisis futbolística que atraviesa el equipo.
Newell’s buscaba cambiar el rumbo de un presente complicado pero no pudo doblegar a Estudiantes en el Estadio Coloso Marcelo Bielsa y empató 1 a 1. El encuentro, válido por la Zona A, el equipo de Cristian Fabbiani no logra levantar cabeza en un semestre para el olvido.
A los 42 minutos, La Lepra tuvo la chance de ponerse en ventaja a través de un penal que Andrés Merlos cobró luego de una falta de Rodríguez sobre Herrera.
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Pero luego de la revisión por VAR, el juez se retractó y sancionó falta fuera del área.
A los 30′ del complemento, Eric Meza definió cruzado haciendo estéril el vuelo de Espínola y puso en ventaja al Pincha.
rimer tiempo sin emociones. Estudiantes fue más, tuvo varias chances claras, pero no pudo convertirlas. Fabricio Pérez, por la banda izquierda, fue un dolor de cabeza para Mosquera: velocidad, desequilibrio y manejando los hilos del equipo. La Lepra, en cambio, nunca logró acomodarse, perdida en la mitad de la cancha. Luca Regiardo prácticamente no apareció, Banega impreciso, todo pelotazos. El Coloso explotaba, silbidos a cada error, un clima pesado que se sentía en el aire. Luciano Herrera fue lo mejor de la Lepra, empujando, buscando hacer reaccionar al equipo, pero nada alcanzó. Así, se fueron al descanso con un 0-0 que dejaba todo abierto… y la tensión en el estadio a flor de piel.
En el segundo tiempo, el equipo de Cristian Fabbiani arrancó mejor, aunque cada avance visitante con Ascacibar generaba contras peligrosas. El partido se volvió un constante ida y vuelta. Y llegó el gol. Vino desde el banco: a los 30 minutos, el recién ingresado Eric Meza la clavó en el palo derecho del arquero, desatando la euforia… y también la bronca de los hinchas. “¡Que se vayan todos, que no quede ni uno solo!”, se escuchaba desde las tribunas.
Pero en el fútbol, nada está dicho. Y en el cierre, tras un córner, Luciano Lollo conectó la pelota y marcó el empate, desatando un desahogo total en el estadio.
Fuente: NA - CLGN